Norberto de la Cerda y Paula López son un matrimonio joven que apostó a iniciar una pequeña empresa familiar. Se trata de un servicio de mensajería cuyas oficinas se encuentran ubicadas en un primer piso de 14 y 138 de Berazategui. El matrimonio lleva adelante las tareas ad-ministrativas y la organización de los viajes, y la han bautizado, uniendo sus apellidos, como «DLCL S.R.L.»
Trasladan todo tipo de mercadería que pueda ser llevada en moto; en su mayoría, papeles administrativos. Y poseen además un servicio de miniflete cuando el bulto es de mayor tamaño y peso. Trabajan con clientes particulares y con diferentes empresas.
El servicio, que nació hace dos años y medio en el distrito y que funcionaba en un primer momento en 11 y 130, se presta a todo el Gran Buenos Aires y Capital Federal en el horario de 8:00 a 18:00 horas. El envío se realiza en el mismo día o con reserva de horas. Los cadetes, que son alrededor de diez y trabajan con sus motos propias, se encuentran legalmente registrados, «ya que se trata de una actividad riesgosa», señala Paula López.
Los Inicios
«En el comienzo fue costoso porque era tirar folletos, hacer publicidad, visitar empresas. No nos conocían, hasta que una empresa berazateguense confió en nosotros. Luego, con el boca a boca, fuimos siendo conocidos y ampliamos nuestra actividad», cuenta Paula. En la actualidad trabajan no sólo con empresas conocidas de Berazategui, sino también de Quilmes y Florencio Varela. «Nos estamos haciendo conocer de a poco» agrega.
El logo de la compañía –dos hombres tomados de la mano formando un sobre de carta- fue ideado por Norberto pensando en los principios de la empresa: «la confianza, la transparencia y el compromiso».
La confianza
«Nosotros transportamos mucho valor, y por eso tenemos que ganarnos la confianza del cliente. Mantenemos la verdad cueste lo que cueste, les contamos detalladamente los pasos del cadete. Siempre lo mantenemos informado sobre el estado de su trámite», asegura Paula y continúa: «Gracias a Dios los empleados nunca sufrieron un robo, pero en ese caso nos haríamos responsables. Lo repararíamos, responderíamos de la forma que fuese. Estamos en tratativas de tener un seguro de traslado de valores, y viendo si lo implementamos de un momento a otro, porque todo es valioso para el cliente».
El objetivo
La aspiración de Paula y Norberto es que este servicio de mensajería llegue a ser un correo privado. «La idea siempre fue esa, y para eso, tenemos que pasar por un montón de situaciones», expresa Paula. «Estamos agradecidos del lugar en el que estamos parados, pero no nos conformamos porque la idea es seguir sumando empresas como hasta ahora ».
Para los dueños de esta empresa familiar, todos sus clientes son importantes en la misma medida. «Norberto tiene una capacidad de logística de organizar los viajes de una manera increíble; no es fácill», afirma. «Queremos ofrecer un buen servicio a un precio razonable y poder implementar el correo. Uno cuida al cliente al extremo para ofrecerle un buen servicio, y de la misma manera cuidamos a los chicos, que son los que lo sostienen».
El deseo
«Lo que tenemos hasta el momento lo logramos gracias a Dios y, de la misma manera, no nos va a costar llegar al correo privado que queremos formar. Mi sueño es poder ver mucha gente trabajando y continuar brindando un servicio transparente. Mi estrategia fue empezar acá en Berazategui y luego ramificarnos para que en un futuro, no muy lejano, podamos contar con empresas que nos respalden», concluye Norberto.
Si el lector los necesita sólo deben llamar al 4256-9482.
